Marco Scaglione
Estudié en el instituto Hotelero de Montecatini, que me proveyó las competencias básicas para conseguir a mirar adelante: a la experimentación y al ahondamiento. Así, después del diploma en el 2001, he decidido de concentrarme en la cocina ligada a las intolerancias alimentares. He escuchado las impresiones de la gente sobre este mundo gluten-free, que al inicio de los años 2000 parecía redoblado en si mismo, justamente atento a la medicina, pero demasiado lejos de los deseos de quien se sienta a la mesa no para saciarse, sino para nutrirse adecuadamente y deleitarse con buenos sabores.
Tiempo: 30 minuti + tempo di riposo
Dificultades: minima
Ingredientes para 4 personas:
6 racimos de tomates rojos con 300 g de pan rallado sin gluten para 5 dl de leche con 50 g de alcaparras saladas< br>1 huevo
100 g de queso Parmigiano Reggiano rallado
125 g de queso pecorino fresco
4-5 mechones de perejil y 2-3 ramitas de mejorana con aceite de oliva virgen extra
Saque
pimienta negra en granos
Procedimiento
Lave los tomates, divídalos horizontalmente por la mitad y cúbralos internamente con una cuchara, retirando las semillas y el líquido En el interior, sin romper la pulpa; Colóquelos en una tabla de cortar y escúrralos durante 20 minutos.
Remoje el pan sin gluten picado durante 5 minutos en un bol con leche, luego escúrralo y exprímalo bien con las manos; Transfiérelo a un segundo tazón. Agregue las alcaparras enjuagadas y picadas, el huevo y el queso parmesano y mezcle hasta obtener una mezcla homogénea. Agregue el perejil lavado y picado, el queso de oveja privado de la corteza y corte en cubos, 1 cucharada de aceite, una pizca de sal y una pimienta molida y mezcle todo con una cuchara.
Transfiera la mezcla a un sac a poche con una boquilla grande y en forma de estrella y distribuya la mezcla dentro de las mitades de tomate; Colóquelos en una sartén con papel phono y hornee a 180 grados durante 20 minutos. Retire del horno, adorne con la mejorana y sirva.