Marco Scaglione
Estudié en el instituto Hotelero de Montecatini, que me proveyó las competencias básicas para conseguir a mirar adelante: a la experimentación y al ahondamiento. Así, después del diploma en el 2001, he decidido de concentrarme en la cocina ligada a las intolerancias alimentares. He escuchado las impresiones de la gente sobre este mundo gluten-free, que al inicio de los años 2000 parecía redoblado en si mismo, justamente atento a la medicina, pero demasiado lejos de los deseos de quien se sienta a la mesa no para saciarse, sino para nutrirse adecuadamente y deleitarse con buenos sabores.
Tiempo: 1 ora
Dificultades: Facile
Crostatina con harina de Avellanas, crema al jengibre y a fruta
Ingredientes por 6 personas
Por la pasta manida:
210 g de Manteca
210 g de azúcar refinado
420 g harina de arroz impalpable Sacho
40 g harina de avellanas Sacho
5 huevos
10 g engoma de guar bio
la cáscara rallada de una naranja tratada
una pizca de sal
Por la crema al jengibre:
380 g de leche entero fresco
120 g nata fresca
6 yemas
160 g de azúcar refinado
45 g Harina de arroz impalpable Sacho
6 g jengibre en polvo
Por la Fruta:
6 albaricoques
5 fresas
1 kiwis
3 granos de uva negra
Por el jarabe
300 g agua
160 g azucaro
20 g glucosa
PROGRAMA 18
Dorado /
Forma /
Durada 2 horas y 27 minutos
Procedimiento:
Procedimiento por El amasijo
En el contenedor PAN añadís la manteca corta a pedacitos y los huevos, seleccionar el programa 18 y comprimir START. Después de unos 10 minutos añadís la harina de arroz, el guar y la harina de avellanas junto al azúcar.
El amasijo dura en todo 27 minutos; a mediados del programa averiguar de ello la consistencia que tiene que resultar bastante compacto.
Al término del programa extraer el amasijo del contenedor pan, forma una pelota y dejáis descansar por 40 minutos en una tarrina cubriendo el todo con una película y teniendo cura de mojar el superfice del amasijo.
En el ínterin preparar la crema, calentando la leche y la nata y el jengibre en un cazo, sin hacerlo hervir. Trabajar en una tarrina las yemas con el azúcar, sacudiendo enérgicamente el compuesto con los látigos eléctricos, hasta hacerlo claro y espumoso; añadir a lluvia la harina de arroz y seguir trabajando. Verter a hilo la leche siguiendo a amalgamando con los látigos para evitar que se formen grumos, si necesario pasar la crema conseguida con un tamiz a jerseyes espesos. Trasladar el todo al cazo de la leche mezclando sin parar, hasta cuando la crema aparezca cremosa pero densa.
Trasladar la crema a una amplia tarrina, ayudándose con una espátula, y mezclar hasta cuando se haya constipado; cubrir con película de cocina y manera ahora descansar en la nevera por 1.
Retomar la pasta manida, eliminar la película y trabajarla velozmente sobre el plan con el palmo de la mano, sin calentarla demasiado; tenderla con el matterello sobre el plan ligeramente enharinado al espesor de 3 mm. Utilizando un corta galletas circular, recortar discos de pasta manida y forrar con este de los moldes de crostatina untados y enharinados y agujerear de ello el fondo con las púas de un tenedor. Cocer las cáscaras de pasta manida en el horno caliente a 170 °C por unos 20 minutos, por lo tanto desenhornar y dejar ahora enfriar por 1 acerca de.
En el ínterin preparar el jarabe; verter todos los ingredientes en un cazo y manera hervir hasta cuando el compuesto no resulte bien denso y cremoso.
Echar el todo a enfriar en un boulle por unos 30 minutos.
Retomar la crema y sacudir enérgicamente con un látigo a mano, por lo tanto distribuirla en las cáscaras de manida