Marco Scaglione
Estudié en el instituto Hotelero de Montecatini, que me proveyó las competencias básicas para conseguir a mirar adelante: a la experimentación y al ahondamiento. Así, después del diploma en el 2001, he decidido de concentrarme en la cocina ligada a las intolerancias alimentares. He escuchado las impresiones de la gente sobre este mundo gluten-free, que al inicio de los años 2000 parecía redoblado en si mismo, justamente atento a la medicina, pero demasiado lejos de los deseos de quien se sienta a la mesa no para saciarse, sino para nutrirse adecuadamente y deleitarse con buenos sabores.
Quien sigue una "correcta alimentación" sabe bien que es fundamental el aporte de fibras, es decir, aquella parte de carbohidratos no digeribles o fibras sintéticas que permiten al organismo sostener la función prebiótica.
La fibra alimenticia no es un nuevo descubrimiento, porque realmente el término "fibra alimenticia" fue acuñado en 1953, pero el efecto laxante de los alimentos ricos en fibra es conocido desde hace tiempo. Ya en el año 440 a.C., Hipócrates describió como laxante el trigo molido groseramente. El papel de la fibra alimentaria en la prevención y el tratamiento del estreñimiento se considera una panacea para los países industrializados.
Las fibras se dividen en varias categorías:
Los polisacáridos estructurales asociados a la pared celular incluyen los polisacáridos no celulósicos (hemicelulosa y algunas pectinas) y la celulosa.
Componentes estructurales no polisacáridos, principalmente lignina.
Polisacáridos no estructurales; gomas mucílagos secretadas por las células; polisacáridos procedentes de algas.
La fibra alimentaria sólo se encuentra en los alimentos vegetales: frutas, verduras, hortalizas, frutos secos y granos.
El contenido de fibra de los cereales disminuye con el proceso de refinado, en efecto, la concentración de fibra alimentaria es más elevada en los cereales integrales, especialmente el salvado de trigo.
El mercado hoy está muy atento a presentar productos con las claim "alto contenido de fibras" o "fuente de fibras" precisamente para satisfacer las exigencias del consumidor final.