Marco Scaglione
Estudié en el instituto Hotelero de Montecatini, que me proveyó las competencias básicas para conseguir a mirar adelante: a la experimentación y al ahondamiento. Así, después del diploma en el 2001, he decidido de concentrarme en la cocina ligada a las intolerancias alimentares. He escuchado las impresiones de la gente sobre este mundo gluten-free, que al inicio de los años 2000 parecía redoblado en si mismo, justamente atento a la medicina, pero demasiado lejos de los deseos de quien se sienta a la mesa no para saciarse, sino para nutrirse adecuadamente y deleitarse con buenos sabores.
Tiempo: 1 ora più lievitazione
Dificultades: facile
Un pan colorido y sabroso, con un sabor y un aroma intensos que me recuerdan al verano.
Características:
Del nombre original Ocimum basilicum, la albahaca tiene hojas que van del verde al morado intenso. Sus hojas frescas, ovaladas o lanceoladas, dan sabor a ensaladas y primeros platos entre mayo y septiembre.
Aporta vitamina C y A, así como minerales como el hierro y el calcio.
Notas históricas:
La albahaca tiene raíces antiguas; en las Indias, era apreciada por sus propiedades curativas, casi mágicas. Fueron los romanos quienes la introdujeron en el Mediterráneo, donde comenzó a extenderse como símbolo de salud y prosperidad, consolidándose especialmente en el sur de Italia. Durante el siglo XVIII, la albahaca se expandió por la península y llegó a Liguria, una tierra ideal por su clima, pasión agrícola y cultura gastronómica: la albahaca comenzó a tener usos culinarios.
Notas:
El aceite esencial de albahaca tiene propiedades purificantes y antiinflamatorias, y se utiliza en aromaterapia.
Ingredientes para aproximadamente 1 kg de masa:
500 g de pan y pizza especial Molino dalla Giovanna
5 g de azúcar granulado
10 g de vinagre de vino blanco
390 g de agua
20 g de levadura fresca
50 g de aceite de oliva virgen extra
20 g de pasta de tomate
5 g de sal
100 semillas de girasol
30 g de albahaca fresca
Se permite usar harina de arroz y de maíz.
Preparación:
Vierta el agua en un bol junto con el azúcar y la levadura y mezcle bien hasta que se disuelva.
Vierta la mezcla y la pasta de tomate en un bol grande o en una batidora planetaria, mezcle inicialmente, luego vierta la dosis de agua preparada y trabaje la masa vigorosamente. Después de unos minutos, añade el vinagre, el aceite, la sal y la albahaca previamente picada o troceada gruesa. Sigue amasando hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
Transfiere la masa a una superficie enharinada y trabaja hasta que esté suave y homogénea; luego, dale forma de bola.
Con la ayuda de una báscula, toma porciones de 100 g y forma bolitas redondas. Deja reposar en una bandeja de horno cubierta con papel vegetal durante aproximadamente 1 hora en un ambiente cálido y sin corrientes de aire, hasta que la masa haya doblado su volumen.
Precalienta el horno a 220° y, cuando alcance la temperatura, pincela con una mezcla de aceite y agua a partes iguales. Hornea los panecillos durante unos 10 minutos. Tras la primera cocción, abre el horno a 190° y deja que se terminen de cocinar durante otros 15 minutos.
Al final de la cocción, retira el pan del horno y deja enfriar durante unos 20 minutos sobre una rejilla.